30 de Julio de 2019.
Decidimos que nuestro retorno a las Cicladas, seria a la isla de Anafi, ya que dejarnos caer mas al Este hacia Karpathos nos dejaría bastante complicada la subida, recordemos que nuestro cuartel de invierno sera en Galatas, en el golfo de Poros.
A las 5.30 suena el despertador, bueno, suena Marie por que yo no me entero de nada, terminamos de preparar el barco, para una travesía de 66 millas, con vientos de W, dingui en cubierta, motor en marcha, electrónica, piloto, ancla arriba, nos vamos, la bahía de Espinalonga esta completamente plato, llevamos un mes en Creta, fondeados en el mismo sitio y nunca había estado así, se diría que nos vamos justo cuando calma por fin el viento.
Llegando a la isla de Espinalonga, nos sorprenden algunas rachas de 15 nudos, que parten de 0, de la nada absoluta, se lo atribuyo a que el saliente del faro, esa punta, acelera de alguna forma el viento, no en vano hay molinos eólicos arriba, pienso que al alejarnos unas millas no habrá nada de viento o apenas.
Acercándonos al cabo, veo que esta mucho mas Norte de lo que anunciaba el parte, sigo pensando que al alejarnos de la influencia de la isla mejorara y entrara por fin el W, incluso SSW, Javi ya va a vela, ciñendo con 40 grados, incluso algo menos, a nosotros hasta 55 grados no podemos, a este barco no le gusta ceñir y a mi menos, de modo que aquí estamos, a motor, mayor y trinqueta, con viento estupendo de 12 a 15 nudos, que no puedo aprovechar si quiero ir a donde vamos.
Por un momento veo en el Ameno, los 50 grados, me resisto, se que es inútil sacar las velas aun, ya que en pocos segundo o algún minuto las enrollare de nuevo, pero sigo atento a cualquier mínimo cambio, abro un poco el rumbo, justo para que me de para ceñir, quito motor, saco el genova y tenso todo al máximo, una vuelta de aquí, otra de allá y vuela, hacemos 5,8 nudos con 12, 14 de real, lo cual no esta mal para un barco con 30 años, construido para portantes oceánicos, el barco se acomoda al viento, se apoya en el, el ruido del motor nos dejo, solo oigo el silbido del viento pasar entre las velas, y la mar contra el barco dejándose surcar, la linea de pesca por popa, quien sabe si la suerte hoy nos acompañara, como en la travesía anterior.
Ciñendo a rabiar, hemos ganado 2 millas al W y las mantengo, según vallamos subiendo y llegando a destino el viento debería entrar mas de Norte, por eso intentamos ganar todo el barlovento posible, para después según role el viento a Norte, ir sacrificando el terreno ganado, de forma que podamos estirar la travesía el máximo tiempo a vela, Regina ciñe mejor y a ganado 4 millas de barlovento, vamos a pelear por cada centímetro, incluso sacrificando velocidad, estamos a la mitad del camino, quedan 33 millas, es tan bello navegar a vela teniendo cerca todo lo que te importa, que lo que pasa fuera de estos 14 metros, importa un pepino.
Finalmente no queda mas remedio que poner el motor, el viento rolo a Norte en apenas 2 cables de distancia, ya cedimos el barlovento ganado y seguir a vela me desvía muy al Este de la isla, me la paso de liso... Al acercarnos a la isla ademas de llevarlo de frente, a subido a 25 nudos, hay una mar confusa en el único fondeo de Anafi, al menos el fondo es de arena de 5 metros a las 18,30 tiramos la Rocna y sus 50 metros de siempre, no hemos podido comer en la travesía, ya que la mar no lo a permitido, el viento no nos dejara en unos días, ya sabemos como se las gasta el Meltemi, nos da una bien venida de 3 días con 25 a 30 nudos de viento, se siente uno como en casa...
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