26 de Diciembre de 2017.
No es un pañuelo pero si un mantel, no deja de sorprenderme esta casualidad que aconteció en agosto y que ahora se reaviva con fuerza para pensar en lo del mantel.
En Agosto, estábamos en Vulcano, en las islas Eólicas, o Eolias según donde lo mires o quien lo diga, estábamos con Javier con su Miss Regina y nosotros, tomando el sol y recreándonos con las maniobras que unos y otros hacían para meterse en un fondeo, pequeño infinidad de barcos de todo tipo, no se que hacíamos nosotros en ese lugar ya que huimos como alma endiablada de las zonas turísticas, pero tampoco puedes pasar por estos lugares y no desembarcar y pasar unos días, el caso es que desde nuestro caótico fondeo, observamos un barco que sin tripulación parte solo llevado por el viento, Javi me alerta por la radio y lo observamos un par de minutos, llegamos a la conclusión que a garreado y se va solo, nos disponemos a saltar al dingui para ir a socorrerlo cuando con los prismáticos observamos que sale una persona de dentro, pero que al llevar el ancla a la pendura pensábamos que había garreado, hasta aquí un incidente mas, una anécdota sin importancia de un verano cualquiera.
Acabada nuestra temporada de navegación, en Italia, Crotone concretamente, nosotros estamos en Automarina Tricoli, es Noviembre y nos dice el marinero del club de al lado, Pascuale, que hay una chica viviendo sola en su barco, en el YKC, Yachting Krotone Club, hacemos por encontrarnos y rápidamente nos disponemos a tomar unas cervezas en La Taperia, único bar Español que hay en Crotone, de esa manera nos vamos contando lo que hemos navegado, donde, que hacen ellos, nosotros... y casualmente en Agosto en las mismas fechas andaban en Vulcano, el es Italiano ella Suiza, viven en Suiza, hablan italiano perfecto, este año como nosotros han soltado amarras, dejado sus trabajos y van a navegar unos años, charteando su barco, cuando caigo en la cuenta de que el barco que vimos garreando en Vulcano es el Tritone 3, comparando fotos
Romina nos confirma que efectivamente eran ellos.
Ahora escribo estas lineas viéndolo, pues lo tenemos a nuestro costado de Babor. Ellos han dejado el barco aquí y volverán en un par de meses, cuando sacaremos los barcos e iniciaremos la temporada 2018 por el Jónico juntos. La Mar es un Mantel.
El Petite Marie, vestido de invierno en su nuevo amarre del YKC, Yachting Krotone Club